Autónomos

La Ley de Prevención de Riesgos Laborales es fundamental para garantizar la seguridad en el trabajo. En España, este enfoque ha ganado relevancia en los últimos años, pero los autónomos siguen siendo un grupo con necesidades específicas.

1. Presentación de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales

 

La promoción de medidas preventivas en el entorno laboral se erige como una faceta esencial para disminuir la cantidad de accidentes de trabajo y el número de enfermedades ocupacionales.

Los trabajadores autónomos han sido históricamente uno de los grupos más desatendidos en lo que respecta a la seguridad laboral y la prevención de riesgos laborales.

En la actualidad, solo los autónomos que cotizan por incapacidad temporal (IT) tienen el derecho de asegurarse contra accidentes laborales y enfermedades profesionales, y acceder a las correspondientes coberturas.

Existen marcadas diferencias en la forma en que la legislación laboral se aplica a los trabajadores autónomos en comparación con los empleados asalariados.

La mayoría de las regulaciones están diseñadas principalmente para regular la relación entre empresarios y empleados asalariados, lo que crea un cierto grado de ambigüedad jurídica para los trabajadores autónomos.

Por lo tanto, los autónomos tienen la responsabilidad de gestionar la prevención de riesgos laborales y comprender sus obligaciones legales.

2. Cuándo Implementar la Prevención de Riesgos Laborales

 

Para determinar cuándo un autónomo debe aplicar la prevención de riesgos laborales (PRL), es crucial hacer una distinción entre los siguientes casos:

Autónomos sin empleados a su cargo: En este escenario, no es necesario contar con un sistema de gestión de PRL, llevar a cabo una evaluación de riesgos ni establecer un plan de prevención de riesgos.

Autónomos sin empleados a su cargo pero sujetos a regulaciones de coordinación de actividades empresariales: En este caso, es necesario proporcionar información sobre los riesgos que las actividades o equipos pueden representar para los empleados de otras empresas con las que se colabora. Puedes obtener más detalles sobre cómo gestionar la PRL en estos casos aquí.

Autónomos con empleados a su cargo: En esta situación, es esencial implementar la PRL, lo que implica asumir las responsabilidades del empresario según la normativa laboral vigente. En empresas con hasta diez empleados, el empresario puede encargarse de organizar la prevención siempre que desarrolle su actividad de manera habitual en el lugar de trabajo y tenga la capacidad necesaria en función de los riesgos de la empresa. Puedes obtener más información sobre cómo gestionar la PRL en estos casos aquí.

3. Cómo Establecer la Prevención de Riesgos Laborales

 

Cuando se trata de autónomos con empleados a su cargo o aquellos afectados por regulaciones de coordinación de actividades empresariales, la práctica común es contratar a una empresa especializada en la implementación de programas de prevención de riesgos laborales. Esta opción es altamente recomendable para evitar una sobrecarga de tareas que podría retrasar tus objetivos comerciales y de producción, que son áreas cruciales para los autónomos.